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domingo, 13 de enero de 2008

Mi historia proscrita y tristemente real, de 2006

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me encantó, Charlie. De veras.

Es increíble cómo puedes plasmar en palabras una historia tan dolorosa como real. Te felicito.

Por otra parte, te compadezco. Por eso que relatas hemos pasado todos, y lo que nos queda. ¿Quién en el mundo es capaz de entregar su amistad sin condición y no dejarse engañar? ¿Quién es capaz de ver el Alma de los demás y ser tan ignorante como para afirmarlo?

Yo he recibido tantas puñaladas... Y sé que me quedan muchas. Sé que personas que valgan la pena están contadas con los dedos de una mano.

Ante esto sólo puedo decirte lo que a mí misma me aplico: mejor solo que mal acompañado.

Suerte.